Museo de arquitectura al aire libre
A una parte del centro histórico de Lima se le conoce también como el «Damero de Pizarro». Recibe este nombre porque sus calles se construyeron siguiendo un plano rectilíneo. El espacio es muy compacto y, desde la Plaza Mayor, antigua Plaza de Armas, la mayoría de los monumentos están a poca distancia caminando. Eche un vistazo a la Casa de Aliaga, la casa colonial más antigua de la ciudad y, probablemente, de toda América del Sur. Visite también el Palacio Torre Tagle, la actual sede del Ministerio de Asuntos Exteriores. Una de las atracciones turísticas más impresionantes es el complejo monástico de San Francisco, formado por 3 iglesias, 5 monasterios, una biblioteca y varias criptas. En un tour de 45 minutos, un guía le llevará por los impresionantes edificios y su interior clásico, decorado con frescos, cuadros, esculturas de madera, miles de libros antiguos encuadernados en cuero y una colección de arte digna de admirar. Lo más destacado de la visita son las criptas, que hasta comienzos del siglo XIX fueron el cementerio de Lima. Aquí descansan los restos de más de 15.000 personas.
El famoso balcón
Los preciosos balcones de madera no pasarán desapercibidos mientras recorre los distintos monumentos de la zona histórica de Lima. Algunos de los ejemplos más famosos se encuentran en la fachada del Palacio Arzobispal y en los balcones de la Casa de Pilatos, de la Casa del Oidor y de la Casa Negreiros. Como los balcones son característicos de la arquitectura colonial, la ciudad ha animado a sus habitantes a que adopten alguno. De este modo, se aseguran de que los balcones se mantengan correctamente y se preserven como un monumento histórico y cultural.