El candado del amor
La N Seoul Tower se ha convertido en un santuario romántico para las parejas que desean declararse amor eterno. Como en el Pont de l'Archevêché de París, las puertas de la torre están llenas de candados de todos los colores y tamaños, firmados con los nombres de las parejas enamoradas. A diferencia de otras ciudades, Seúl anima a la gente a poner los candados: no hay nada más bonito que el amor. Con el paso de los años, la torre cuenta con miles de candados.
El fenómeno cultural de las parejas
En un país en el que el besarse en la calle está mal visto (las muestras de afecto no se deben realizar en público, sino en privado), los surcoreanos expresan su amor de una forma especial. Las parejas muestran su relación llevando la misma ropa. Puede que lleven los mismos zapatos, camisas, chaquetas o incluso la misma ropa interior. Este fenómeno cultural también es percibible en la N Seoul Tower. En los últimos años, la cultura de parejas se ha convertido en un gran mercado. Solo por curiosidad, busque en Internet las palabras “pareja moda Corea” y encontrará una gran selección de prendas combinables.
Alta cocina y ositos de peluche
En todo caso, la N Seoul Tower merece la pena visitarla, tanto si es soltero como si tiene pareja. Además de las impactantes vistas de la ciudad, n.Grill, el restaurante de la torre, sirve una exquisita cena. El chef Duncan Robertson, que anteriormente había trabajado en los restaurantes con estrella Michelin Nobu y L’Atelier de Joël Robuchon, elabora los mejores platos de la gastronomía francesa. La N Seoul Tower también está dirigida para niños: la plataforma de observación alberga el Museo del Osito (the Teddy Bear Museum), en el que los ositos de peluche muestran la historia y cultura de Corea del Sur de una forma divertida y lúdica.